Cien

Páginas en blanco, listas para llenarse de historias

Alguna vez pensé en llegar a las 100 publicaciones? Nunca! Pero me gusta que así sea. Nunca he dicho que ésto es un gran proyecto de mi vida, o me he creído un escritor y letrado de renombre o que mis textos son la mar de interesantes y bien escritos, pero me gusta y por eso lo hago, y por lo mismo hay cierta sensación de alegría de haber llegado a tal número de publicaciones.
A través de éstos años he intentado ser yo mismo, sin máscaras ni tapujos, dar mis opiniones, mis pensamientos, mis puntos de vista, importele a quien le importe, y si no, pues me da igual y ya está. No me creo dueño de la verdad, pero siempre digo lo obvio: si veo que no tengo la razón, no discuto. Simplemente expreso lo que siento y lo que opino, o me refiero a algo en especial o en general. Me baso en mi experiencia, en mis vivencias, en mis momentos de compartir con el resto del mundo, intentando elevar ese subjetivo comentario a algo más objetivo, manteniendo la escencia y la idea.
Todo lo que he escrito hasta ahora en éste blog me gusta, y por eso lo he escrito. Pero claro, siempre hay predilectos.
Mi historia grande o arco argumental favorito? Uhm, complejo. Me gustan varios, como Sueño de Una Noche de Verano, Pesadilla Antes de Navidad, y también Cuando Chico Yo Veía..., y no puedo olvidar En Los Pantanos de la Realidad. Aún así, creo que mi preferido es el que hace un análisis, resumen e información sobre los monos animados de nuestra infancia, unos textos llenos de recuerdos que me gustó mucho transcribir a palabras y al blog, además de recordar tiempos mejores.
Los textos infaltables del blog? Varios. Caballeros Andantes o Escorias?, siempre me ha gustado, siempre ha sido de mis favoritos, y lo considero uno de los escenciales del blog. También está El Teorema de la Yuxtaposición, y el extenso 8.8, o incluso el reciente El Protagonismo de las "X". Pero sin duda, mi favorito es el primero que nombré, aquel descarado análisis del absurdo comportamiento de las mujeres respecto a los hombres, en su inagotable afán de relacionarse con los "tipos malos" en desmedro de los "tipos buenos", y además quejarse de ellos...
La historia que más me ha gustado? Dos la verdad. Y por razones diferentes. Estrellas y Columpios, y Una Historia de Fantasía. La primera me gusta leerla, la segunda me gustó escribirla. Me encantan ambos relatos, tienen unas ideas que me han llamado siempre la atención, y quise explorarlos en ellos. La verdad, y no es que lo vaya a hacer, pero me gustaría revisar y ver la opción de expandir esas historias. Esos personajes dan para más, y en mi mente tienen más desarrollo, pero falta seguir la idea.
 Éstas 100 publicaciones también son gracias a muchas personas que, cada cual en su tiempo, me han dado el apoyo y el ánimo de seguir escribiendo y aportando estupideces al mundo en forma de textos. También lo he hecho por mi, mal que mal es mi blog, son mis cosas las que escribo y comparto, las historias que cuento, o son creadas por mi. Creo que aún hay mucho que escribir acá, no se si llegaré a las 200 publicaciones, pero aún queda mucho paño que cortar y muchas historias que compartir. A veces me ha faltado el combustible para avivar esas chispas y pequeñas llamas que rondan mi cabeza. No es fácil hilar bien las ideas, especialmente cuando las ideas no se dejan hilar bien, como son la mayoría de las cosas que escribo.
Y todo ésto, sin contar con otras historias que andan por ahí. Algunas terminadas, aunque sean en partes, aunque se pueden leer independiente. Otras aún falta terminar. Otras deben ser revisadas. Pero aún hay muchas cosas escritas, que probablemente nunca estén acá, pero sirven de inspiración, de chispa inicial, para escribir más cosas acá. Ejemplo de ello son la historia extraña de Hee e Yll, en En Los Pantanos De La Realidad, aquella extraña historia casi sin sentido. Ellos forman parte de otra historia en otro cuento, en otro mundo, en otro universo quizás, por lo mismo lo relatado puede encajar perfectamente con ellos. Son personajes, como dije en otro lado, que rondan mi cabeza hace mucho tiempo, y les quise dar la oportunidad de "ver la luz" en otro relato, que podría perfectamente también ser un relato normal de ellos.
Hace muchos, muchos años se despertó en mi la idea, las ganas, el deseo de escribir historias, de contar cosas, de relatar hechos ocurridos, de inventar personajes de fantasía, y me he dedicado a ello por largos años. Sin embargo, éste blog me ha dado la oportunidad de expresar de una forma diferente las cosas, de contar nuevos y viejos hechos vividos, de inventar nuevos protagonistas de nuevas historias, y de seguir con mi manía de escribir, de querer contar cosas.
No es fácil sentarse y enfrentarse a una hoja en blanco, o a una pantalla en blando (en tiempos más modernos). Ver una hoja o una pantalla en blanco, significa que debes tener cómo llenarla, pero no siempre es fácil. A veces tienes una idea, pero cuesta desarrollarla de manera coherente, entendible, o que quede bien. Son pocas las veces que el derrame de ideas de tu cerebro es tan prolijo en primera instancia, que puedes llenar fácilmente hojas y hojas. Pero por lo general es más complejo de lo que parece. Hay que darle forma al tema, dejarlo "en remojo" un tiempo, que "cuaje", y después también quedan las modificaciones o ediciones, no siempre la idea que se plasma debe ser textual, pues muchas veces sólo uno las entiende bien, y hay que ser solidario con el lector, aunque eso tampoco significa escribir pelotudeces simples que cualquiera las entienda. Todo eso es complejo en tiempo y en desarrollo, para que una historia quede como uno quiere, como uno quería que quedara, que se parezca a la que tienes en mente.
Aún así me gusta escribir, expresar ideas, historias, y lo seguiré haciendo. seguiré inventando personajes, desarrollando historias.
Las personas van y vienen, así también los personajes. Pero lo que queda son las historias, y es por las historias que escribo.
Gracias a quienes hayan pasado alguna vez por acá a leer éstas tonteras, porque por ellos también es que llegué a la publicación número 100.

REK.