martes, 19 de diciembre de 2017

Les Misérables

LES MISÉRABLES

(Escrito por ahí, en el Pasado. Revisado y extendido en el Presente. Para leerlo en el Futuro)


Soy un convencido de que la buena ortografía y la buena redacción, se obtienen leyendo. Y leyendo mucho. Creo que ya lo he expresado por ahí.
Recuerdo que nunca fui fanático de "castellano" (así se llamaba antes el ramo, ahora se llama "lenguaje", creo). La verdad lo aborrecía. Siempre consideré que era inútil aprender tanta cosa que al final no iba a servirte de nada. Y además que la "vieja de castellano" no aportaba mucho a que el ramo gustase. No leí los libros impuestos en el colegio. Yo buscaba los libros rojos de Ercilla, con un resumen en hojas celestes al final. Te leías el resumen, y el 4.0 asegurado. Muchos de esos libros de colegio, después, cuando ya no era por nota, los busqué y los leí. Otros no. Algunos me gustaron, otros no. Algunos eran buenos, otros no.
Mi papá tenía un mueble simple, no podría llamarlo tan ostentosamente "una biblioteca", pero habían varios libros en él. Unos eran azul claro, pequeños, y de letras grandes y hojas blancas. Los otros eran enormes libracos azul oscuro, con hojas amarillentas y letras pequeñísimas. Los primeros eran novelillas de varios autores, unas simples, otras muy buenas, y otras complejas o que en su tiempo no entendí. No las leí todas, claro. Los segundos eran los tomos de libros excelentes, históricos de Chile, como Adiós al Séptimo de Línea, Se las Echó el Buin, Los Húsares de la Muerte, y cosas por el estilo, que leí, y varias veces, y que también han sido parte de inspiración para mi.
También me leí unos libritos policiacos de Agatha Christie, con su inspector Hércules Poirot y su Ms. Marple, que iban resolviendo silenciosamente sus casos. O a  Ellery Queen (en realidad los primos Frederick Dannay y Manfred Bennington Lee) y su personaje homónimo que resolvía los distintos casos que se le presentaban.
Después descubrí a HP Lovecraft, y su mundo de fantasía gótica, misterio y seres horrendos . También descubrí los cómics, y todo su universo de héroes y superhéroes, y otras cosas quizás más interesantes que los héroes, como muchos ya habrán supuesto o comprendido.
Y entre las cosas que descubrí, me encontré con el libro que origina éstas líneas y la imagen de hoy. Les Misérables es una novela del escritor y político francés Victor Hugo, ambientada en los comienzos de los años 1800, pposterior a la Revolución Francesa de 1789 y el Reinado del Terror de finales del siglo, el Imperio de Napoleón, y toda la vorágine de la Europa de aquellos tiempos. La obra se sitúa tanto en lugares rurales como en ciudades del sur de Francia. Cuenta la historia de Jean Valjean, un ex presidiario condenado por robar pan para vivir, y de su deseo de rehacer su vida, con bondad y altruismo. Y la historia de Fantine, una hermosa joven pueblerina, cuya vida se transforma en un infierno, luego de haber estado en el paraíso. La historia va desarrollando personajes e historias paralelas, las que van convergiendo al paso del tiempo. Los caminos de Jean y Fantine, y la hija de ella, Cossette, se tuercen y retuercen magistralmente, donde queda claro que ningún personaje secundario, es menos o más importante que los protagonistas. Algo que me recuerda a The Sandman, donde todos los personajes, por mñinimos que sean, cobran importancia y tienen vital trascendencia para la historia. El libro toca temas interesantes, como lo son la religión, el poder absoluto, la pobreza de un pueblo, y las injusticias de las clases altas, la miseria contra la opulencia, la revolución y las luchas de poder, y otros más. El libro termina como una novela romántica, contando la historia de Cossette y su amor prohibido, Marius Pontmercy. Todo relacionado con Jean Valjean y su propia historia de altos y bajos.
Sin ninguna duda, Los Miserables es mi libro favorito, junto con Adiós Al Séptimo de Línea, y ambos han sido foca de inspiración para mi en muchos aspectos, pero principal y obviamente  en la escritura.
Es una novela altamente recomendable, y además su temática, pese a estar enmarcada en hechos históricos, se aplica a cualquier época o país del mundo, sin importar nada.
Éste ha sido una especie de fusión entre mi propia historia, El Show de los Libros, y la Cultura Entretenida. Extraña mezcla, la verdad..
Les dejo una cita del mismo Víctor Hugo, dejando claro que, Los Miserables, siempre van a existir.

El humano sometido a la necesidad extrema es conducido hasta el límite de sus recursos y al infortunio para todos los que transitan por este camino.
Trabajo y salario, comida y cobijo, coraje y voluntad, para ellos todo está perdido. La luz del día se funde con la sombra y la oscuridad entra en sus corazones; y en medio de esta oscuridad el hombre se aprovecha de la debilidad de las mujeres y los niños y los fuerza a la ignominia. Luego de esto cabe todo el horror. La desesperación encerrada entre unas endebles paredes da cabida al vicio y al crimen...
Parecen totalmente depravados, corruptos, viles y odiosos; pero es muy raro que aquellos que hayan llegado tan bajo no hayan sido degradados en el proceso, además, llega un punto en que los desafortunados y los infames son agrupados, fusionados en un único mundo fatídico.
Ellos son "Los Miserables", los parias, los desamparados.


REK.

miércoles, 13 de diciembre de 2017

Ella y Ella


A ambos nos gustaba una banda en particular, una banda nacional. Eso era sabido. Lo sabíamos. Y siempre conversábamos sobre ello, pues era uno de los puntos en común que teníamos.
Nunca fuimos a un recital o una tocata juntos, que yo recuerde. Habíamos ido en ocasiones diferentes, y sabíamos lo que significaba una tocata en vivo. Pasarlo bien, escuchar las canciones que queríamos, y también compartir con la banda, por qué no? A lo largo de los años fui conociendo y compartiendo mas con ellos, principalmente con el líder, quien era fanático de Batman.
A veces conversábamos planeando ir alguna vez a una tocata juntos, fantaseábamos con eso, con pasarlo bien, con compartir ambos aquel momento sublime, para tenerlo en la memoria para la eternidad.
Pero las no son eternas, como ya se ha dicho, y como sabemos, ni tampoco son perfectas. Nunca fuimos juntos, finalmente. Aunque decir "nunca" quizás esté errado, si lo vemos desde cierta perspectiva.
Años después, comprendería que muchas cosas de la vida dependen del punto de vista con que las miremos. Pero eso no puedes saberlo a la primera, o antes de tiempo. Es el tiempo quien te da la opción de obtener experiencia, y la experiencia es la que te da la sabiduría. Al menos en teoría, claro.
Retomando el tema, la cosa es que una vez, cuando ya habían pasado muchos años, y mucha agua bajo el puente (o quizás no tanta), fui con mi pareja, y los amigos de siempre, a una tocata de esta banda, a un local cercano a donde vivíamos, cosa rara ,la verdad, pero que sucedió.
Antes ya habíamos ido con mis amigos a otros recitales o tocatas de la banda, pero no con mi pareja, quien sólo conocía algunas canciones, las más clásicas o más conocidas, pero nada más que eso. Pero con eso bastaba, además siempre era bueno conocer más. Al final nos habíamos decidido, y por ello estábamos allí aquella noche.
Dudo mucho que lo sucedido aquella noche fuese una simple casualidad. Estoy seguro que era otra de las jugarretas del Destino. Crees en el Destino? Intentas romper sus designios? Y si al hacerlo, simplemente cumples con el Destino que se te tenía fijado? Cómo sabrías entonces?
Aquella noche nos tomamos unos tragos, el local estaba repleto de gente, más que en todo su historial, asumo. Estábamos escuchando y cantando los temas, ahí cerca de la banda, cuando miré al frente y entre el público la divisé. Estaba sonriendo y también cantando los temas. Su mirada se cruzó con la mía y su sonrisa se fue desdibujando de su rostro.

Visto en retrospectiva todo sucedió en un abrir y cerrar de ojos. Yo sólo me limité a sonreír, y miré a otro lado. Alcancé a ver que andaba con su pareja, aquel joven que haciéndose el hueón, el más imbécil de todos, le había ganado la partida a muchos, finalmente. Ella vio con quien estaba yo, mi pareja. Y mi pareja la vio a ella. Las miradas de ambas se cruzaron, entonces. Ninguna dijo nada, solo rehuyeron las miradas, y después siguieron disfrutando el show dentro de lo posible, digamos. Fue un momento extraño, pero sin mayor importancia. Hacía años que no nos veíamos, que no sabíamos nada el uno del otro, y justamente encontrarse allí, donde alguna vez prometimos y pensamos estar, pero ahora cada cual con su consorte, separados en tiempo y en espacio. No pasó más que eso, debo decir. Y mejor que así fuese. No había nada más que pudiese pasar, además. Después de esos momentos que parecieron una eternidad extraña, todo volvió a la normalidad. Cada cual volvió a disfrutar del show, a cantar las canciones, a sonreír y a pasarlo bien, dentro de lo posible, acompañado de sus parejas. Nadie comentó nada. Nadie dijo nada. Ni esa noche, ni nunca. Y así sería mejor. Total, como dicen por ahí, para qué recordar un universo que dejará de existir?

REK.

martes, 12 de diciembre de 2017

El Día que Todos Escucharon lo Mismo

Amor A La Mala

En aquellos tiempos de radio, como dicen por ahí, esos viejos días de radio local, dediqué un tema musical a una persona, a través de una de las emisoras más famosas que había en el país en aquel tiempo.
Pero hagamos algo de historia.
No habían las mismas comodidades ni regalías ni tecnologías que hay hoy, obviamente. Pero habían. No existía ni Spotify, ni Youtube, ni los reproductores MP3. Eran tiempos más simples, como alguna vez he comentado. Pero habían radio emisoras, de todo tipo, y con diferentes estilos de música y de auditores. Y si querías escuchar un tema, lo pedías a los programas radiales que te daban esa opción. Llamabas por teléfono, y salías en vivo, o dejabas tu pedido en una grabación. A veces tenías la suerte y te daban bola y largaban tu tema al aire sin dar el mensaje, solo el tema. Si tenías mucha más suerte, salías al aire y hablabas pidiendo tu tema y decías un par de huevadas más, o largaban tu grabación previa.
Como en toda índole, habían cosas exitosas, y cosas que no. Habían programas de radio exitosos, y otros que no. Y había programas que escuchaba mucha gente. Y claro, dependiendo de los horarios, lo escuchaban ciertas personas y otras no.
Un día en la mañana, muy temprano, antes de las 7 u 8, ya no recuerdo bien, desperté temprano, más de lo habitual. Estaba cuidando una casa de unos vecinos que estaban de vacaciones, algo normal para mi desde hacía años y años en aquellas fechas de diciembre y de vacaciones. Me ganaba mis luquitas, además. El asunto es que me levanté, y me puse a escuchar aquel programa radial mañanero, que siempre escuchaba antes de hacer mis cosas del día a día. Y decidí llamar. Y me respondió la contestadora automática, diciendo que dejara un mensaje y que si quería pidiera un tema. No tenía nada preparado, ni siquiera esperaba que me respondieran, aunque fuese una maldita máquina automatizada con un mensaje pre grabado, así que lo que dije en aquel momento de la mañana, me salió del corazón como se dice. Y sin tapujos ni nada. Y, como dije, hasta pedí un tema y más encima se me ocurrió la genial idea de dedicarlo.
Por qué? Ni idea la verdad. Seguramente me nació, como se dice, y ya. Sin embargo, no era una canción de amor o romántica, como se podría pensar. Para nada. Era justamente lo contrario.No, no era de odio tampoco. Pero era algo nada que ver con el amor. O al menos, desde mi punto de vista. O no? Aunque claro, ahora da lo mismo.
Después de dejar el mensaje, la dedicatoria, y la canción, corté el teléfono, y seguí haciendo mis cosas. Al rato salí, dirigiéndome donde estudiaba en aquellos años. Y allí fue mi sorpresa, cuando mis compañeros comenzaron a molestarme que me habían escuchado en la radio, que el tema, que la dedicatoria, que la persona, que esto y lo otro. Ahí recién vine a comprender lo que había pasado. Lo que había hecho. Justamente tuve la suerte (o mala suerte?) de que ese día muchos de mis compañeros, e incluso otra gente aparte (de eso me enteré después), había escuchado aquel programa aquella mañana, y obviamente reconocieron mi voz, aparte de mi nombre, y se enteraron de aquello. Jamás se me pasó por la cabeza que pasaría eso. Y bueno, si tampoco era tan malo, qué importaba? La verdad me dio mucha risa el tema. Había días que nadie escuchaba aquel programa, de mis compañeros o conocidos me refiero, pero justamente ese día todos lo escucharon. Cosas del Destino, supongo.
Intenté restarle importancia al tema, además que no lo tenía tampoco. No pasaba más allá de una anécdota, algo extraño y divertido. Para mi, al menos.
La persona a quien dediqué el tema también lo supo. No creo que haya escuchado el programa, no era su onda musical, aunque si conocía del ambiente y de la música, pero seguro alguna de sus amigas se lo comentó. O alguien más. Le divirtió, claro, lo tomó como correspondía. Aunque, muchos años después, aún se recordaba de ello.
Fue la primera y única vez que he dedicado un tema así masivamente, por la radio, en aquellos tiempos, y que más encima me escuchara tanta gente. Y, además, ni siquiera era un tema de amor. Pero fue la única, y eso es algo.
Una anécdota de mi vida, como hay muchas, y de muchos temas e índoles distintos.
Dedicaría ahora algún tema musical? Es muy probable que sí. Pero nunca lo haría como aquella vez. No por miedo, o vergüenza. Sino porque quizás los temas que dedicaría, no los pondrían en una emisora.



REK.

PS: La escucharás, de vez en cuando, y recordarás, que te la dedicaron?



domingo, 29 de octubre de 2017

Falsas Promesas

Aunque también podría titularse "Promesas Vacías", ya que no tienen un sustento real, ni menos un argumento válido, ya que claramente todo es mentira, y las mentiras no tienen "peso", salvo para quien las usa, en el fondo.
Una vez un hueón que conocí hace muchos años, y a quien le gustaban las palabras bonitas y la verborrea, dijo una frase que aún recuerdo: "es bueno construir castillos en el aire, lo malo es intentar vivir en ellos".
Claramente se refería a las ilusiones, a cuando tu crees que las cosas son de una forma pero en realidad, y quizás a sabiendas, son de otra. Pero también se aplican a las mentiras, pues quien miente debe seguir viviendo con esa mentira para siempre, pues debe cubrirla de todas las formas posibles, para que nunca se sepa la verdad. Lo cual es penoso, en cierto aspecto.
Yo no podría vivir de mentiras. No digo que nunca haya mentido, o que en el futuro no lo haga tampoco, eso no se sabe. pero "vivir" de mentiras, que tu vida completa sea basada sólo en mentiras, no. O sea, cómo? No podría. Quizás por eso vivo como vivo, la manera en que he vivido, y probablemente la manera en que viviré.
No es que haya sido, ni sea, ni seré, perfecto. Como dicen ciertas personas que, claramente, no me conocen. Solo he vivido mi vida de la forma que se me ha dado, y también he querido, dentro de lo poco que podemos elegir de ella. No ha sido una taza de leche, o un viaje quieto sobre aguas mansas. Ciertamente que no. Pero no he basado mi vida en una seguidilla de mentiras, como otras personas.
Pero volviendo al punto. Cuántas veces he escuchado la frase "no te haré daño"? Ya ni lo recuerdo, y probablemente mientras más lo escuchas, menos sentido tiene. Al final y con los años, te das cuenta que todas esas personas (mujeres), que te dijeron "no te haré daño", son las que más daño te hacen. Ironía? No lo sé. Extraña coincidencia? No lo creo. Sólo creo lo que se y he visto, y vivido. Qué cuesta mantener esas falsas promesas? Por qué mejor no decir nada, antes que una mentira.?
Nunca lo entenderé.
Por lo mismo no creo en la gente.
En nadie.
En nada.
Es mejor así, dentro de todo. Todas las cosas que he vivido, que me han hecho vivir, llegan a hacerme quien soy hoy en día. Para bien, o para mal. Y vivir de mentiras, no es una de ellas. Los años, y las personas (de mierda), me han enseñado lo que comenté; que no debo confiar en nadie. Todos te pueden apuñalar por la espalda, mientras te están jurando que no es así.
Una vez, hace mucho tiempo, en una galaxia muy muy lejana, yo amaba (o creí amar?) a una mujer. Y esa mujer me falló. Después de tiempo juntos, cuando yo, imbécilmente, le estaba declarando mi amor, ella estaba preparando las cosas para venir a la capital (era de provincia, obvio). Yo sin saberlo, claro. Pero al día siguiente, cuando venía en viaje a juntarse con "el otro" (aunque la verdad es que yo era "el otro", pero da igual a estas alturas), lo supe. y trate de sacarle palabra,s pero no pude. Sólo me quedé con la promesa hecha la noche anterior de que "volveríamos a hablar". Pero yo sabía que estaba acá. Se imaginan el infierno que fue ese día para mi? Sabiendo que la mujer que quería, que amaba, estaba tan cerca mío, pero con otra persona?Es terrible. Te sientes mal, tienes ansiedad todo el día. Lo único que quieres es saber qué pasa (aunque ya lo sabes, y es peor). Mil cosas pasan por tu mente, incluso hasta te cuestionas tu mismo, culpándote de algo que eres libre. Una tortura para el alma, para la mente, y el "corazón", como le dicen.
Y después, años adelante en el tiempo, y sabiendo la historia, otra mujer va y me hace lo mismo! Si el Destino es muy gracioso a veces.
Pero las cosas eran diferentes. Eso es lo positivo, al menos. Cuando las cosas pasa, a veces aprendes. Y aunque te pasen de nuevo, siempre tienen una arista diferente, porque ya viviste algo igual, o similar, y sabes como afrontarlo. Eso no significa que sea fácil, para nada, pero te ayuda, sin duda.
Por qué hacer falsas promesas? Promesas que no vas a poder cumplir? Porque tu sabes que tu naturaleza de mierda te va a impedir cumplirlas. Además, si ya no las cumpliste una vez, nada indica que no puedas dejar de cumplirlas de nuevo.
No soy un tipo perfecto, ni pretendo serlo tampoco. Nadie lo es. Pero las cosas que digo, las cosas que he prometido, es porque las he podido cumplir. Cueste lo que cueste. Pero no todo el mundo es así, lamentablemente. Y tampoco me considero un modelo a seguir o imitar. Soy un tipo con defectos y errores como todos. Pero tampoco me ando cagando a la gente por doquier y después ando poniendo la cara de hueón diciendo "la cagué".
Las cosas son como son. Ni mas, ni menos.
Espero algún día conocer a alguien que no prometa cosas que no va a cumplir. Aunque pensándolo bien, ya no tiene importancia.
Promesas falsas y vacías, sin sustento, sin argumento.
Tu especialidad.

REK.

martes, 24 de octubre de 2017

14 Años

 14 YEARS

Me siento extraño.
Me siento confuso.
Estaré haciendo lo correcto?
La verdad, siendo honesto, no lo se.
Sólo el tiempo, maldito tiempo, lo dirá.
Pero no lo tengo claro, y me gustaría saber.
Pero ningún hombre debe saber sobre su futuro, dicen. Aunque, a quién no le gustaría tener alguna información privilegiada sobre qué le depara el futuro, por muy pequeña que sea? A todos, supongo.
Eso me pasa en estos momentos.
Aunque se que no saco nada con elucubrar, o esperar que venga algún ser mágico o divino y me enseñe o me de las respuestas que busco.
Pero me gustaría.
Quizás perdí aquel tacto, aquel "don" de saber algunas cosas con anticipación.
Sería con la edad que lo perdí? O realmente no lo perdí, sino que está"dormido"?
Me gustaría saber tantas cosas, pero no siempre se puede. O no se debe.
Recuerdo este tema, 14 Años de Guns N` Roses. Mi época escolar. Muchas veces me he sentido identificado con este tema. Y hoy vuelve a mi mente.
Algún día dejaré de pagar pecados y culpas de delitos que no he cometido?
La felicidad me sigue siendo esquiva.
Como dijo la puta "nada es gratis"...

REK.


I try and feel the sunshine
You bring the rain
You try and hold me down
With your complaints
You cry and moan and complain
You whine an tear
Up to my neck in sorrow
The touch you bring
You just don't step inside to
14 years
So hard to keep my own head...
That's what I say
You know...I've been the beggar...
I've played the thief
I was the dog...they all tried to beat

But it's been
14 years of silence
It's been
14 years of pain
It's been
14 years that are gone forever
And I'll never have again

Your stupid girlfriends tell you
That I'm to blame
Well they're all used-up has-beens
Out of the game
This time I'll have the last word
You hear what I say
I tried to see it your way
It won't work today
You just don't step inside to
14 years
So hard to keep my own head...
That's what I say
You know...I've been the dealer...
Hangin' on your street
I was the dog...they all tried to beat

But it's been
14 years of silence
It's been
14 years of pain
It's been
14 years that are gone forever
And I'll never have again

Bullshit and contemplation
Gossip's their trade
If they knew half the real truth
What would they say
Well I'm past the point of concern
It's time to play
These last 4 years of madness
Sure put me straight
Don't get back 14 years
In just one day
So hard to keep my own head
Just go away
You know...just like a hooker she said
Nothin's for free
Oh I tried to see it your way
I tried to see it your way


domingo, 1 de octubre de 2017

Historia de un Gigante (III)

La caída triunfante

El gatillo chasqueó.
Otro cargador vacío se deslizó y cayó en el oscuro suelo de piedra.
Era el último.
El fusil se había quedado sin munición.
Rezyl dio la vuelta a su arma y la agarró por el cañón, como si fuera una porra.
Una nueva oleada de muerte gorjeante hizo presa en él, frágil pero agresiva, abrumadora en su número y opresiva en su furia.
La culata del fusil golpeó un cráneo tras otro.
Cedieron y cayeron.
Como otros antes que ellos.
Un montón de pesadillas aniquiladas, mitad hueso, mitad polvo, se acumulaba a los pies de Rezyl.
Había sosiego en él. Estaba tranquilo.
En el caos del combate no había momento para el pánico.
Sus golpes eran amplios, pero calculados. No malgastaba movimientos.
Un demonio le arañó la espalda. Luego otro.
Eran más pesados de lo que sugerían sus frágiles armazones.
Se sacudió al demonio, se dio la vuelta y estampó con fuerza la culata contra la sien de la criatura. El cráneo se quebró y la culata se hundió profundamente en la húmeda y calcárea masa bajo el hueso. Hizo un breve esfuerzo por liberar el fusil, pero tuvo que renunciar a él cuando los demonios redoblaron su asalto.
Rezyl derribó a otro monstruo de una patada y le pisó el cuello mientras giraba para asestar reveses a un montón de atacantes, ansiosos de matarlo.
Si el fusil, su Infernal desgastado por el combate, había servido para reducir la horda y conseguirle tiempo para evaluar la situación, su Flor lo sacaría del apuro.
Como siempre.
El Titán, bañado en cenizas y vísceras de sus enemigos, sacó su arma y, en un solo movimiento, apuntó a las bestias malditas que tenía más cerca.
El fogonazo de cada disparo iluminó la cueva con destellos de calor rojo... Un jardín de flores furiosas que se abrían en abierto desafío a este vil y odioso reino de sombras.
En el otro extremo del mar de fauces rechinantes, el ser malvado bailaba en el aire.
Observaba.
¿Esperaba?
Sin siquiera pensarlo, el cañón de Rezyl estaba cargado y listo para disparar.
Disparó otra ráfaga y seis demonios más se desplomaron muertos sobre el montón de cadáveres.
La bruja lanzó un violento grito.
Y tan rápido como había comenzado, el asalto cesó.
El gorjeo pasó de un rugido atronador a un espeluznante coro que zumbaba a través de la neblina de ébano más allá de su vista.
Rezyl se levantó, enderezó la cansada espalda y respiró profundamente varias veces.
La tormenta no había amainado.
Lo sentía en las entrañas.
No estaba tranquilo, sino alerta. Era la terrible calma que precede a la tempestad.
El ser malvado se rio: un chillido horrible y áspero.
Seguido de pisadas. Fuertes y pesadas.

Tum.
Tum.
Tum.
Tum.

Rezyl escudriñó la oscuridad mientras metía más balas en el cilindro del cañón.
Una figura cobró forma, aproximándose desde las profundidades.
Un ser con una fuerza y tamaño mucho mayores que los del titán.
En la mano sujetaba sin esfuerzo un machete del tamaño de una persona. O más grande.
Su cuerpo era grueso, cubierto de protrusiones óseas. Una armadura viviente, unida con la bestia.
Rezyl suspiró con resignación.
La criatura caminaba como un hombre que cargase con pecados indecibles. Era pesada y lenta, aunque sus zancadas cubrían terreno con una facilidad antinatural.
A Rezyl, la imponente y terrorífica silueta que se aproximaba le recordaba a un antiguo caballero caído en desgracia.
Tal vez antaño hubiera sido un héroe.
Tal vez aquí, en estas sombras, la bruja y su horda putrefacta lo veían todavía como a un héroe, solo que ahora servía a una causa más oscura y siniestra.
La idea intrigaba a Rezyl.
Había venido a buscar pelea. Y el enemigo al que creía una falsa leyenda se precipitaba a su encuentro.
Sonrió bajo el casco y giró su Flor con un seguro floreo de cazador. Apuntó con pulso firme y abrió fuego rápido, amartillando el percutor en rápida sucesión.
El furioso destello iluminó la oscuridad.
Seis disparos, todos al cuerpo.
Las balas de Rezyl rebotaron contra un repentino y trémulo muro de negrura.
El caballero había conjurado de la nada una barrera protectora.
Rezyl no sabía qué métodos arcanos empleaba la criatura, si magia oscura o tecnología inimaginable. Tal vez una combinación de ambas. Pero le daba igual. Recargó el arma y se preparó para enfrentarse a lo desconocido.
El escudo etéreo se desvaneció. La bestia alzó su machete y lanzó un agresivo e inhumano rugido: El grito de guerra del infierno.
Rezyl aceptó el desafío.
Sujetando su Flor con fuerza, el titán se lanzó a la carga.
Combatiría de frente la furia de la sombra.

—-

Habían pasado dos días desde que Rezyl salió de los oscuros corredores bajo la luna, de vuelta a la luz. Su Espectro le pedía detalles una y otra vez. Quería saberlo todo sobre la bruja y su promesa de sufrimiento.
Del mar salvaje de muerte gorjeante.
Del caballero gigante y el épico combate de Rezyl.
El Espectro estaba fascinado y muy preocupado. Si los monstruos bajo la luna estaban activos y
alerta, había que avisar a la Ciudad. Rezyl estaba de acuerdo.
Mientras contemplaban otro amanecer de la Tierra desde la solitaria y silenciosa superficie lunar y planeaban el largo viaje de vuelta, Rezyl sacó un hueso fragmentado de la bolsa que le colgaba de la cadera: Un recuerdo de la maldad que acechaba más allá de la luz y los últimos restos del novio del ser malvado.
Y mientras recordaba lo sucedido durante su tiempo entre las sombras, sacó su Flor de la funda y empezó a incrustar el hueso en el armazón de acero: Solo era un trofeo más de otro combate ganado.

—-

Fue más tarde, ya demasiado tarde, cuando llegaron los primeros susurros y los huesos revelaron su auténtico y siniestro propósito