lunes, 2 de septiembre de 2024

La Cancion de la Rebeldia


D
espués de algunos acontecimientos que he relatado en estas lineas anteriormente, muy anteriormente, mi vida se tornó sombría y solitaria. Mas o menos como lo es actualmente, pero hace mas de 25 años atrás. Todo es cíclico.
Era la década de los 90, ya pasada la mitad de aquella, acercándose rápidamente al año 2000, aquel mítico año donde se iba a acabar el mundo, donde los computadores iban a colapsar y poco menos que iba a llegar el Día del Juicio de Terminator y las maquinas nos iban a a matar, si es que una explosión del sol o un mega re contra terremoto no destruía la Tierra antes. Una década y unos años muy diferentes, en muchos sentidos, a los que se viven y vivo actualmente. Y no sólo por la diferencia obvia de edad, sino porque era también un Chile diferente. No habían celulares, no había internet, no había whatsapp ni nada de eso. Eran tiempos mas humildes quizá, mas austeros, mas de personas y no de maquinas. Tiempos mejores, dirían incluso algunos.
 Alguien me dijo una vez que la música que escuchábamos, la música que nos gustaba, la música que nos acompañaba, de una u otra manera se transformaba en la banda sonora de nuestras vidas. Y tenia razón. Hay canciones, temas, músicas, soundtracks, que se convierten en justamente eso, la banda sonora de nuestros momentos en esta vorágine llamada vida. A veces para bien, a veces para mal, pero siempre hay algún tema que nos recuerda algún hecho en particular, algún tiempo en concreto, alguna vivencia, o peor aun, o mejor aun, alguna persona.
 Con los años posteriores, cuando el tiempo ha pasado y decanta todo, llame a este tema "la canción de la rebeldía", y la verdad el nombre no le corresponde para nada supongo, porque de "rebelde" yo no tenia nada en esos tiempos. Ademas un acto de rebeldía implica que no estas de acuerdo con algo, y haces lo imposible contra eso, luchas contra aquello. Y yo, mas que luchar (dentro de lo que luche, claro), simplemente terminé aceptando mi nueva realidad y aprendiendo a vivir de ella y con ella. Pero así la bauticé hace años, y así la recuerdo. 
 El tema en cuestión es No Me Gusta el Sol, de la banda chilena Los Tres. Sin duda esta agrupación musical ha tenido gran impacto en mi vida, y como dijo aquella persona eones atrás, y como comente hace unas lineas, se convirtieron en parte de la banda sonora de mi vida. Con buenos y malos capítulos, hay que decirlo.
 En si la canción es bien extraña, con frases un poco sinsentido y que a grandes rasgos no se entiende que historia es la que quiere contar, algo medianamente normal en las canciones de esta banda. Sin embargo, para mi la relevancia era una sola frase, y que es la que le da titulo a la misma: No Me Gusta el Sol. Pero para entender mejor, tendré que hacer algo de historia. 
 No es que sea la mujer más importante de mi vida, para nada. O siquiera que alguna vez fuésemos algo mas que lo que fuimos. Pero por alguna razón esos años marcaron mucho de lo que fui después, y probablemente de quien soy ahora. Y ella sin duda fue parte de esa historia. Quizá la parte crucial de todo ese tiempo, que aunque fue corto en cierta manera, me dejo tanto penas, como enseñanzas, y también un par de alegrías, mientras duró claro.
 Simpática, agradable, y como alguna vez dije, esa simpatía hacia mucho por ella. Y no es que fuese fea, para nada, su sonrisa me encantaba, pero también es verdad que no destacaba como modelo de Avon supongo. Su pelo  era algo castaño claro, mal cuidado, mal tratado (del tipo malas experiencias con la tintura, aunque nunca supe porque alguien tan joven usaba esos químicos) Eso sumado a la animosidad de su cabello de hacerse unos resortes, y expandirse sobre todo al viento, y sumado a su cara un poco redondeada, hizo que en algún momento ella fuera definida como una "cara de sol" (dato de ninguna importancia es que ella (según recuerdo), era un poco voluptuosa pectoralmente (nada exótico ni exuberante tampoco), entonces cantábamos la canción de Heidi, ese mono japones de antaño, en la parte que decía "mira el sol, como sale, por detrás de las montañas", aludiendo a aquella parte de su anatomía eran las montañas, y de que su cara representaba al sol... Cosas de jóvenes, supongo, y como dije, sin ninguna importancia).
 Bueno, volviendo al tema, aquella frase de la canción era solamente como para demostrar (a quién, ni idea, pues no quedaba nadie, salvo yo), que ella no me gustaba, en el sentido hombre/mujer, en el sentido amoroso de la apalabra "gustar", y además era una forma de repudiar todo lo que había pasado, e incluso de renegar lo que había vivido o sentido. Ella era el sol que no me gustaba. nunca había sido de esa forma. Y también era la historia reciente (en aquel momento), que odiaba estar pasando.
 La otra parte de la frase que da el coro a la canción dice "a quien me de y no le pida, sufrirá de amor". Supongo que pensaba en aquel tiempo que era una especie de advertencia, un desquite también, para que no me volviera a pasar lo mismo, para que nadie se quejara después de que no di lo que se suponía. Finalmente he sido yo quien mas ha estado en aquella situación de dar y no recibir nada a cambio. La vida puede jugar de forma muy irónica sus cartas
 Recordé todo esto hace unos días, estando en una actividad nocturna como muchas otras veces, puse música para que me acompañe en aquellas batallas, y justo salio esa canción, y los recuerdos vinieron a mi mente, entre disparos y muertes virtuales. Hoy por hoy no tiene ninguna importancia, ni el tema ni ella, ni siquiera la historia acaecida en aquellos años. Solo la recordé, y quise escribir de aquello, mal que mal en esta nueva etapa escribo para mi, para nadie mas, y yo quería hacerlo.
 No me gusta el sol, y no me gustaba en aquellos años tampoco.
 Sin embargo, la Vida y el Destino se encargarían en el futuro de hacerme intimar con otro Sol, de manera muy personal.

REK.

miércoles, 21 de agosto de 2024

Cadenas del Miedo Rotas

Es innegable que a través de los años, nuestros pensamientos y la forma de mirar el mundo van cambiando. Llámese evolución, madurar, o lo contrario, o nada de eso. Pero siempre pasa, para bien, o para mal.
Cuando niño no pensaba demasiado en mi vida futura, en como seria, o que haría. Siempre he comentado que tengo pésima memoria infantil, que me acuerdo de muy pocas cosas, y la mayoría de las que me acuerdo de forma mas nítida son por alguna razón compleja, como el accidente automovilístico que sufrimos como familia, o cosas así. Lo positivo no mucho, aunque algunas cosas triviales o normales si, pero muy especificas. 
Pero como dije, no pensaba en el futuro. Qué niño lo hace? Sólo quieres que pase luego el día de escuela para llegar a casa y hacer otras cosas, y después salir a jugar con tus amigos del barrio. Bueno, al menos en aquellos años de mi infancia era así. La escuela era solo en la mañana. Tenias toda la tarde disponible para hacer las tareas u otras cosas. No es que hubiese televisión o internet o juegos de consolas, para nada. Pero en las tardes o mas de noche salias a jugar con tus amigos, porque en esos años había que salir a jugar a la calle, a ensuciarse, a andar en bicicleta, a correr jugando al pillarse, etc. Ahora no. Pero no pensabas en un futuro ni siquiera a mediano plazo, mucho menos en tu vida adulta en un futuro.
Creo que, al menos en mi caso, recién en la educación media, y mas cercano a salir de ella, es cuando comienzas recién a pensar en que harías, que seria de ti, en unos años. Recuerdo cuando con unos amigos (actualmente nada, desde hace eones), pensábamos en que iríamos a estar haciendo en 10 años desde aquel entonces, eso sería mas o menos para el 2005. Honestamente ni idea que estaban haciendo esos tipos, y claramente no me interesa. La historia se encargo de mover las fichas de modo que no supiera mas de ellos, afortunadamente. Yo en esos años estaba en un trabajo de mas tema físico, mas sacrificado en cuanto a horarios, y me cambie a uno de horario mas normal, digamos "horario de oficina", y mucho mas tranquilo en lo que a esfuerzo físico se refería. Para mi fue un buen cambio, al menos. Es lo que puedo decir, supongo
En los tiempos en que era mas joven por ahí por los años 90, yo pensaba que iba a tener en el futuro una pareja, una mujer a mi lado que compartiera en cierta forma mis gustos, yo también en cierta forma los suyos, y compartir obviamente mucho mas que eso, llegando a estar juntos por mil motivos y mas. Era lo que pensaba y esperaba. Tan inocente. Hay gente que tiene suerte en sus vidas, por llamarlo así. Encuentran sus parejas, sus compañeros de viaje, y logran la felicidad entre dos. Como dijo un personaje de cómics, yo hace mucho que no tengo suerte, y probablemente nunca la tuve en realidad, al menos mirando hacia mas adelante que un par de meses o un par de años. No me quejo en realidad. He tenido buenas compañera. Pocas la verdad. Un par en realidad. Pero tampoco terminaron en nada mas que un viaje temporal. También he tenido mala suerte, claramente. Sin entrar en detalles, por lógica. No es necesario. Pero no me quejo. Las experiencias, buenas y malas, son las que te enseñan, de las que aprendes (aunque he de decir que en algunas me ha costado aprender en realidad). Son esas situaciones, todas ellas, toda tu vida pasada, todas las cosas que has experimentado, las que te hacen ser quien eres hoy. Son las que te forjan como persona, como piensas, como actuás, lo que esperas, y lo que ofreces. Y no me quejo, como dije ya. Solo constato el hecho que, hoy por hoy, en la estricta soledad, la que realmente siempre ha estado conmigo, ya no me planteo esas cosas que pensaba cuando mas joven, cuando esperaba mas de la vida, cuando era mas idealista. Hoy no pienso. Solo vivo. No en todo ámbito obviamente. Al menos en lo que trato hoy en este derrotero, si.
Quizá tuve miedo de la soledad en algún momento. Si. Y varias veces he dicho que amo la soledad. Y es verdad. Te da experiencias imposibles de replicar si estas acompañado. Pero reconozco que en algún momento me plantee esos pensamientos y miedos. De llegar a una edad mas avanzada (no viejo, pero tampoco de 20), y estar solo, no tener a nadie a quien contarle tus cosas, con quien compartir vivencias. La vida me ha preparado para la soledad, y aunque la acepte y la viva, a veces pienso en qué de diferente hubiese sido con alguien al lado mio. Pero luego dejo esos pensamientos, y como dijo Lois Lane, sólo vivo de la forma que siempre debió ser, la forma en que es actualmente. 
Ahora no tengo miedo, si es que lo tuve. Rompo las cadenas de esos pensamientos, y me entrego a lo que soy, lo que me ha tocado vivir, lo que viene y lo que me falta aun. Solo.

REK.

 


miércoles, 7 de agosto de 2024

Por Qué Volver a Escribir?

Esa es una pregunta que me he hecho durante todo este tiempo, y creo que no tenía una respuesta clara, o convincente, hasta hoy. Y no es que "hoy" sea un día especial ni nada por es estilo. Simplemente fue hoy, sin ninguna razón aparente.
El tema es que había dejado de escribir, porque necesitaba un descanso físico y mental. No sabía cuánto iba a durar ese descanso, ese año sabático que me había tomado. Quizás era temporal, quizás era indefinido, o hasta definitivo. No lo sabía. Pero hace un tiempo empecé a preguntarme si volvería, y las razones de ello. Y hoy, las tengo, y por eso estoy acá. Cierto es que no negaré que también pens{e en no volver nunca. En dejar este hobby. He de ser sincero.
Las razones, aunque en un principio ocultas para mi, eran más simples de lo que pensaba, pero debía encontrarlas, debía recordarlas. Debía entender todo de nuevo, como para embarcarme nuevamente en este viaje. No es fácil, aunque la gente cree que lo es. Pero tampoco estuve, o estoy, acá porque lo fuera. no?. Al final es como la vida misma, tiene de dulce y agraz. Y nada más reconfortante que terminar una historia, terminar un relato, terminar un derrotero, sabiendo que ha quedado bien, y que te gusta.
Al final vuelvo a estar acá primero porque quiero, nadie me obliga (ni siquiera yo mismo). Estoy acá porque es lo que me gusta. Y no porque en tu día a día pasen un montón de mierdas que no aporten en nada a tu vida, vas a dejar de hacer lo que te gusta. Y, principalmente, porque es mi sueño. Escribir. Me encanta. Se que no soy un escritor, ni siquiera voy a vivir de ello. Para mi es un hobby, como mencioné, algo que hago porque me entretiene y porque me gusta. A duras penas soy un escribidor de historias.  Pero aun así es mi gusto, es mi delirio, es mi deseo.
Además tengo muchas historias aún que contar, que relatar, que idear, que escribir. Y me importa un soberano si a nadie le interesa, o si hay quienes los lean o si ni siquiera existe alguien que los lea.
No me importa.
Porque encontré la razón.
Lo hago por mi, y para mi.
Como siempre debió ser.

REK.