Una Paloma Azul Para La Princesa: La Leyenda de Los Demonios de Razgriz

Ilustración de "Una Paloma Azul Para La Princesa"

UNA PALOMA AZUL PARA LA PRINCESA

Una historia detrás de Orion Poplar

La Batalla Día a Día

Todo empezó ya hace tanto tiempo que nadie recuerda el por qué o de qué es esta guerra, mil y una batallas, mil y una muertes, y mil y un pueblos saqueados…
Yo sólo soy un mensajero de la batalla el cual fue encomendado a ver el resultado de la batalla en la muralla de Gebet. Los soldados del reino de Fato ganaron la batalla, pero tuvieron muchas pérdidas, demasiadas para reagruparse y seguir hasta Gebet…

            Bueno, siempre ha sido así. Mil y una batallas en la muralla que separa a estos dos reinos. A lo que me iba cabalgando nuevamente a al castillo, vi algo que me sorprendió y me hizo bajar. Una bella paloma azul, estaba herida en un ala, la cual estaba sangrando. Le puse una pequeña venda y me la llevé al castillo.

Ya al llegar a las puertas del castillo sonaban los gritos de una doncella la cual era la princesa de Gebet. Otra guerra más en la cual yo no quería dar mensajes y tampoco ver, pero bueno, tengo que entregar mi mensaje. Al entrar al castillo la princesa me mira asombrada y grita a todo el palacio:

– ¡Mira, aquí viene el mensajero de la muralla de la frontera! ¿O me equivoco? ¡Tal vez ocurra un milagro y traiga alguna buena noticia que no sea sobre esta guerra!- dijo en tono de sarcasmo.

– Mi señor.- Me postré ante su majestad que estaba sentado ya harto del escándalo de su hija. -Aquí le traigo el mensaje.- Cuando finalicé de decir el mensaje la hija del rey me mira nuevamente pero con cara de preocupación.

– Ya veo, muy bien has hecho al sobrevivir, esta guerra nos va a pasar la cuenta a todos… Bueno creo que mandaré más refuerzos a la muralla, los otros reinos están esperando que esto termine para tomarse Gebet. ¿Podrías avisar al cuartel y a la frontera de la situación? Solo dejaremos algunos soldados de reserva. Ya tenemos suficientes problemas como para dejarlos todos allí.- dijo sonrientemente el rey como su rutina diaria.

 Desde antes que él tomara el poder, esta guerra se desató, ya nadie sabe el por qué y el dónde, pero se sigue luchando por el territorio.

– Si mi lord, en seguida.- le respondí para poder escapar de la acosadora mirada de la princesa.

– Espera un minuto.- Me detuvo el Rey.

– Esa bella ave que llevas se ve mal. ¡Trisca! ¿Quieres esta ave de color azul?- Le preguntó a su hija, la que notó ver a la bella ave. Ella solamente la agarró con delicadeza  y se la llevó a la sala de curaciones. Tal vez ahora se sentiría un poco mejor ya que si le traje una buena noticia que no era sobre la guerra, además, yo también me sentí mejor al darle la paloma a ella, hace mucho tiempo que no la veía sonreír.

La Princesa y El Ave

- La paloma tenia el ala herida por una flecha, aun ahora me recuerda esta guerra que ni siquiera mi padre sabe porque empezó, solo trata de apaciguar al reinado de Fato pero nada es como él puede hacerlo. Le entiendo de cierta forma, pero un día me tocará a mí estar sentada en el trono y no quiero que el mismo destino pase en mi reinado.-

La princesa Trisca pensaba mientras curaban a la paloma azul. Para ella fue como un chispazo de esperanza, ella esperaba que se terminara de curar y entrenarla como paloma mensajera para poder comunicarse con el príncipe Berren, los cuales eran muy buenos amigos y se conocieron a través de una negociación de paz en la cual no se solucionó el problema y se separaron desde entonces. Ellos utilizaban palomas mensajeras para comunicarse, pero un día la paloma nunca mas regresó a ella y pensó que tal vez tuvo un destino parecido al de la paloma azul, sólo que ésta sí pudo soportar hasta el final de la batalla.

 Después de que la curaran, ella se la llevó a su cuarto y la dejó en una jaula para poder cuidar de ella, ahora las discusiones con su padre ya no se escuchaban, e incluso los sirvientes extrañaban los gritos de ambos, aun así les gustaba volver a recordar la paz en el palacio. Al paso del tiempo la paloma iba recobrando energía gracias al amor y dedicación de su dueña, la cual todos admiraban, porque a pesar de la guerra, ella seguía cuidando de ella. Al paso de 2 meses en las cuales hubo 3 batallas sin ganador, la paloma pudo recuperarse por completo. Pero un día justo cuando se alarmó de una batalla más, la princesa se desmaya en su cuarto por su fatiga acumulada y dejo la jaula abierta.

Los sirvientes vieron a la princesa en el suelo y todos acudieron inmediatamente a ayudarla pero nadie se percató hacia donde se dirigía la bella ave de plumaje azul…

El Regreso a Casa

Mientras, se libraba la batalla entre Gebet y Fato, en la frontera de los ya mencionados. Hubo una luz relampagueante que todos los soldados vieron, y se detuvieron por unos segundos.

Sí, era la paloma azul que traje ese día. Un escalofrío dentro de mí, ¿qué le habrá pasado a la princesa?, ¿se escapó aquella querida ave? Y además, ¿Cómo esa majestuosa ave pudo ser herida si podía volar de esa forma? Bueno al ver ese rayo de luz majestuoso, los soldados de Gebet lucharon como si estuvieran poseídos. Incluso yo también fui a luchar, ya no quería ser espectador de una guerra sin sentido.

Mientras la lucha seguía, la paloma azul en menos de 15 minutos llegó hasta el Estrecho de Razgriz, que está muy alejado de la frontera donde se encontraba la lucha.

            Al llegar allí se encontró con cuatros estatuas de hielo las cuales eran de unos soldados muy antiguos, dos eran espadachines y dos eran magos. La paloma azul tocó con su pico las cuatro estatuas y se posó en el medio y empezó a brillar intensamente. Sus alas crecieron como las de un halcón y voló más rápido que antes.

Al regresar aquella majestuosa ave ya sin que nadie se percatara, de ella salieron los cuatro soldados, los cuales quedaron al medio de todos los soldados. Algunos trataron de golpearles pero fue en vano. Los soldados despertaron y una gran aura negra salía de ellos. Los soldados de ambas naciones se apartaron impactados y como si hubieran llegado a la paz, lucharon unidos contra ellos. Pero cada caballero era invencible, y todos los soldados fueron masacrados sin importar de qué nación eran. Cada uno de ellos fue masacrado, cortado o quemado vivo, entre otros de los horribles destinos que les esperaban. Pocos soldados, incluyéndome, pudieron escapar de las horribles garras de estos “demonios”, si es que no hay otra palabra para describirlos. Al terminar su matanza, ellos gritaron como para todo el mundo:

-Somos los Caballeros de Razgriz, traeremos paz de cualquier forma que sea necesaria.- Después de eso, ellos se dividieron en 2 grupos, un mago y un espadachín, y empezaron a caminar.

Esto me trajo muy mala espina y fui con mi caballo al palacio. Ya que ambos equipos se adentraron en los reinos de Gebet y Fato.

Los Demonios de Razgriz

Ya era demasiado tarde, los Demonios habían llegado al castillo, una espeluznante escena que ni siquiera se la deseaba al peor de mis enemigos. Todos los guardias esparcidos en el suelo y una alfombra de sangre. Quedé paralizado al ver aquella escena.

Escuché el grito del rey y me apresuré a ver que pasaba…

Aunque ahora me arrepiento de haber entrado. El Rey estaba flotando en el aire y uno de los demonios estaba desenvainando su espada.

–¡Alto ahí!– se escuchó el grito de la princesa que se interpuso entre la espada y su padre. Una escena inimaginable hace muchos meses atrás.

–¡Si queréis hacerle algo a mi padre tendréis que pasar por mi primero!– Desafío la princesa a los demonios. Los Demonios repentinamente se arrodillaron ante ella dejando caer al rey.

–Sólo seguíamos nuestras órdenes, mi Lady.– le dijeron a la princesa. Impactada sin saber que hacer primero, vio a su padre que estaba herido de gravedad y llamó a los sirvientes, después se dirigió a los Demonios y antes de hablar con ellos el aura de los Demonios cambio a color azul.

–Ustedes… ¿Quiénes son realmente?– Pregunto confundida la princesa.

–Somos los Caballeros de Razgriz–. Respondieron ellos, pasaron unos minutos y llegó el príncipe de Fato.

–¡¿Berren?! ¿Qué haces aquí?– Preguntó la princesa.

–¡Trisca, me alivia verte en una pieza! ¿Estás bien?, al parecer también recibiste estas visitas.– dijo el príncipe de Fato y de su espalda salieron los otros dos caballeros los cuales les explicaron que sus deseos eran sus ordenes.

Ambos se abrazaron por el tiempo que no pudieron ver y miraron a los caballeros los cuales se arrodillaron ante ellos.

La Leyenda del Ave Azul

–¡Berren! pero…– Balbuceo la princesa Trisca al ver a su amigo que hace meses no se mandaban cartas por culpa de la guerra, fue tanta la emoción de ambos, que se abrazaron sin espera. Después Berren le explicó a Trisca que el encontró una paloma azul y parecía lo bastante inteligente para ser paloma mensajera y además se camuflaba con el cielo, pero una flecha perdida le impacto en una de sus alas, fue lo que le dijo uno de sus mensajeros de guerra. Después Trisca le contó su versión de lo sucedido y los caballeros se arrodillan en frente de ellos

 –La paloma azul que vieron y cuidaron es la encarnación de nosotros, hace 15.000 años atrás ocurrió una guerra parecida, incluso dos de nosotros éramos enemigos, pero un día una hechicera nos congeló debido a nuestros grandes poderes y nos llevó a los helados estrechos de Razgriz y a nuestras almas las convirtió en la ave azul, la que ustedes cuidaron con todo su amor y afecto. Estas acciones demuestran lo que sienten el uno hacia el otro.

Al decir estas ultimas palabras ambos príncipes se sonrojaron

–¿Y que pasará con ustedes?– Pregunta Trisca.

–No se preocupen, nos quedaremos hasta que sus reinos se estabilicen y lleguen a la paz.– Respondieron los cuatro caballeros como si fueran uno solo.

–Después volverán a sus heladas tumbas y se convertirán en aquella ave azul…– Dijo Berren con un tono de tristeza.

–Sí, pero no se preocupen, siempre estaremos vigilando a todos desde el cielo.–

Después de tres años…

Los Reinos de Gebet y Fato terminaron su guerra al morir ambos reyes de dichas naciones.

Mientras al pasar de estos tres años después de los eventos ocurridos con los demonios, caballeros misteriosos, hubo un “cese el fuego” en el cual ambas naciones se ayudaron para poder reconstruir los daños causados por la guerra.

Después de que los herederos al trono ocuparan sus puestos, se unieron y convirtieron los reinados de Gebet y Fato en el reino de Falena bajo estas palabras…

Cuando la historia presencia un gran cambio.

El ave del Estrecho de Razgriz se revelará.

Primero como un Demonio.

Como un Demonio Negro que hará llover muerte sobre el campo.

Pero después se volverá un Caballero azul y volverá a los Cielos

Como un gran Héroe…

 -

UNA PALOMA AZUL PARA LA PRINCESA

Una historia detrás de Orion Poplar

 

Escrito por  Ellinor Graun

Ilustrado por Arno Bester

REK.

PS: El texto corresponde a la Leyenda de Razgriz, correspondiente a Ace Combat 5: The Unsung War. Es una historia de fantasía (en teoría), de los mitos y leyendas de Belka. 

No es un texto original mío. Sólo lo modifiqué para que se entendiera mejor, y lo escribo acá.