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martes, 16 de julio de 2013
Esa Noche en Soledad
Recuerdas la primera vez que te sentiste solo?
Citando a uno de los grandes personajes del comic, Wolverine: "Nacemos solos, vivimos solos y morimos solos. A veces con suerte encontramos compañía por el camino... Y yo hace mucho que no tengo suerte"
Amo la soledad. Me encanta ese estado de sentirte sin ataduras de ningún tipo a ningún tipo de ser. Ok, es verdad, tenemos las familias, los familiares, los amigos, e incluso parejas; pero el sentirse solo es algo sublime y que va más allá de todo eso. Incluso mucha gente puede tener mucha compañía, pero aún sentirse solo. Esa soledad me gusta, y me gusta también la soledad absoluta. Estar en algún lugar tu solo, sin nadie conocido, y con ningún humano cerca. En un desierto, en una playa con el mar bravo golpeando la orilla, en la cima de un cerro, en un observatorio astronómico con todo el cielo, literalmente casi, ante tus ojos, y sentirte absolutamente solo casi en todo el universo.
No es que siempre quiera estar solo, me gustan ciertas compañías humanas, pero también se disfrutar y aprovechar esos momentos de soledad. Hay gente que teme estar solo, que se aterra con la sola idea de la soledad, que son capaces de lo inimaginable solamente por no estar o sentirse solos. Tontos. No saben lo que la soledad es capaz de entregar, si sabes aceptarla y comprenderla.
Hace muchos, muchos años, hice mi declaración de principios con un tema de Cafe Tacvba titulado Esa Noche, y aún lo mantengo. Me encanta esa canción, como está hecha, como la interpreta Cosme (o como quiera que se llame en el momento que la cante), y me encanta aún más la versión con Petinellis, con Los Tres, e incluso con el Pollo Fuentes. Esa canción tiene mucho de lo que yo siento, y también me trae muchos recuerdos de diferentes cosas, diferentes hechos, y es una de las principales en la banda sonora de mi vida.
Esa Noche es una canción escrita por los hermanos Rangel, de Cafe Tacvba, e interpretada por el mismo grupo en su segundo disco de estudio, Re, en 1994. Está dedicada a Chavela Vargas, connotada folclorista costarricense nacionalizada mexicana, influencia de muchos en la música ranchera. Es una especie de bolero en guitarra y mandolina, cantada por Cosme (como se hace llamar Rubén Albarrán en éste disco). También ha sido interpretada, como dije, por los mismos Cafeta con Los Tres, con Petinellis, e incluso con José Alfredo "El Pollo" Fuentes, en una versión llena de los vibratos clásicos de éste intérprete chileno.
La canción en sí habla justamente de la soledad y del reconocimiento del protagonista del tema de que la soledad siempre será su acompañante, su consorte. Se distinguen dos interpretaciones, o más bien dos personajes que cantan en diferentes tiempos, aunque sea Cosme quien siempre es quien canta. Más bien es la letra la que indica quién es, supuestamente, quien está hablando a través de la canción, si el personaje, o su soledad.
Parte con el coro, el cual se va repitiendo varias veces en la canción, y especialmente en el final, donde se conjuga la voz de lo que indica el coro, con lo que casi en murmullo reconoce el protagonista. Aquel coro indica la idea del protagonista de que aunque haya quedado solo, ya tiene otra compañía inmediata: la soledad. Luego comienzan las estrofas de la canción como tal. En la primera parte se distingue al protagonista de la canción, hablando sobre su separación con su pareja, hablándole imaginariamente a aquella pareja con la cual ya no está, hablándole sobre aquel hecho, y de cómo la soledad ha vuelto a ser su pareja en su ausencia. Y de que ciertamente eso no es una pérdida, sino una ganancia. Que no ha sido malo, sino bueno que esté solo (con la soledad, se entiende). Después del coro, viene la parte donde se distingue que es la soledad quien interpreta. Habla sobre los tiempos en que vio al protagonista feliz con su pareja (ahora su ex pareja), y de que él se olvidó de ella (de la soledad). Añade que ahora que él está solo, y cuando recuerda a su ex, es justamente cuando vuelve con la soledad, y que ella siempre será su amante incondicional. Después le da una interesante advertencia, diciendo que si vuelve con su ex, no olvide que ella también la conoció (a ella, a la soledad, refiriendo que su ex también ha estado sola). Después viene el coro en el final repitiéndose varias veces, intercalando la frase que resume toda la canción: "mi soledad, siempre he pertenecido a ti".
Hace muchos años, y lo he dicho varias veces, ésta canción fue un himno para mi, un estandarte el cual aún llevo, y que, como dije en el inicio de éste escrito, es mi declaración de principios. Me declaro amante eterno de la soledad. Y aunque algunas veces haya tenido a alguien en mi vida, la soledad ha estado esperándome en un ricón, silenciosa, calma, esperando el momento preciso de volver a estar conmigo.
Quizás se le pueden dar muchas interpretaciones a la canción, de hecho hay más, y es válido. Yo la escucho, la vivo y la siento como la he descrito, y aunque no pretendo ser dueño de la verdad, en este caso es lo que a mi me vale. Y también muchas vueltas de tuercas al tema de la soledad. Cada cual también tiene sus propias experiencias.
El estado de soledad nos enseña a convivir con nosotros mismos, a valorar lo que somos, a ver quizás por nosotros mismos nuestros errores, o problemas, y solucionarlos, y no que siempre sea gente externa la que lo haga, casi siempre en un tono crítico extremo, más en son de venganza por algo, que de samaritanos que buscan que mejores como personas.
No es que prefiera estar solo, que con alguien, espero no se malentienda. Simplemente digo que cuando estoy solo (ya sea solo sin pareja, o solo en algún lugar), disfruto esa soledad. Mal que mal, como dijo Wolverine, a veces encontramos alguien que nos acompañe un poco del camino de nuestras vidas.
REK.
No me hubieras dejado esa noche
porque esa misma noche encontré un amor
Parecía que estaba esperando
tu momento de partir
parecía haber observado
mis momentos junto a ti
No me hubieras dejado esa noche
porque esa misma noche encontré un amor
Me abrazó el instante mismo
que tú me dijiste adiós
y no fue una gran tristeza
fue como ir de menor a mayor
Tu regreso había esperado
más te veía muy feliz
en los brazos de tu amada
te olvidaste tú de mí
Más ahora que recuerdas
a mis brazos vuelve ya
seré por siempre tu amante
tu novia: la soledad
Y si alguna vez regresas
con aquélla que te amo
sabes no será lo mismo
pues también me conoció
No me hubieras dejado esa noche
porque esa misma noche encontré un amor
(mi soledad siempre he pertenecido a ti)
No me hubieras dejado esa noche
porque esa misma noche encontré un amor
(mi soledad siempre he pertenecido a ti)
No me hubieras dejado esa noche
porque esa misma noche encontré un amor
(mi soledad siempre he pertenecido a ti)
No me hubieras dejado esa noche
porque esa misma noche encontré un amor
(mi soledad siempre he pertenecido a ti)
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3 comentarios:
Ah porfin encontre una interpretacion como la mia. Ya pensaba que era el unico que lo entendia asi. Es una de mis canciones favoritas, sobretodo por la letra. Saludos
Era casi lo que me imaginaba, aunque yo pensaba que toda la canción la cantaba la soledad, sobretodo porque tiene sentido que la soledad le cante toda la canción a un hombre... Pero de ésta forma tambien se entiende muy bien. Muchas gravias por el aporte.
Que bien no había tenido en cuenta la letra, ahora también me identifico...
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